A partir de las ocho y media de la mañana se realizaba el devoto Rosario de la Aurora con la Virgen de la Solidad, trasladándose esta hasta el Castillo de San Romualdo, origen de la corporación.

Posterior a este acto, la imagen de María Santísima de la Soledad estuvo expuesta en solemne veneración.
Ya por la tarde se llevó a cabo un acto de meditaciones ante Nuestra Señora de la Soledad, las mismas estuvieron a cargo de los hermanos Juan Pedro García López, Ángel Martínez Sánchez, Antonio Jesús Padilla Gurría, Antonio Pérez Vila, Susana Rodríguez González, José María Ruiz Coello y el sacerdote Pedro Pablo Vicente Martorell. Este acto estuvo amenizado por la capilla musical Mater Dolorosa.

A la finalización del mismo se procedió al Solemne Rosario de Antorchas de vuelta hasta la Iglesia Mayor Parroquial. Momento especial el paso de este cortejo en por la Iglesia de la Divina Pastora donde se realizó una oración y una ofrenda floral al Santísimo.