La hermandad de la Soledad vivía en la tarde de ayer uno de sus días grandes dentro de los actos del 275 aniversario fundacional, pues realizaba la salida extraordinaria de su titular mariana, la Virgen de la Soledad.

A las 18:30 horas se abrían las puertas de la iglesia Mayor Parroquial para dar paso a la comitiva formada por las diferentes hermandades de la ciudad, hermanos portando cirios, representantes del ayuntamiento isleño, mantillas, miembros de la comisión del aniversario así como de la Hermandad de la Soledad de Chiclana.

El cortejo recorrió las calles Real, General Serrano, Las Cortes, 24 de Septiembre, Antonio López, González Hontoria, Rosario, Murillo, San Esteban, San Gaspar, Constructora Naval, Colón, Churruca, Ancha, Manuel Roldan, Colon, Cardenal Spínola, Murillo, La Herrán, Real, Almirante Cervera, Jorge Juan, San Vicente, Pérez Galdós, Callejón Nicolás Carrillo y Real.

Antes de la salida de la hermandad a la calle, la hermana mayor Mercedes Muñoz, dirigió unas palabras a todos los hermanos recordando la importancia del acto a celebrar.

La primera levantá del paso de la Virgen de la Soledad estuvo a cargo del hermano número 1 de la cofradía, Juan Ortiz Collantes.

Durante su recorrido por las calles de la Isla, la Virgen estuvo acompañada musicalmente, por la Banda de música de la Asociación Cultural Agripino Lozano (Cruz Roja), y al igual que ocurre cada viernes Santo fue portada por una cuadrilla de cargadores de la Asociación Jóvenes Cargadores Cofrades (JCC) bajo las ordenes de Juan Carlos González Gago y Francisco Gómez Baña.

Momentos destacados de esta procesión extraordinaria fue el paso por la calle González Hontoría donde la Coral de la Puente interpretó el ‘Himno del Aniversario’. En la calle Maestro Portela esta misma formación musical cantó el ‘Ave María’ de Giulio Caccini. Tras esta pieza, la banda de música de Agripino Lozano hizo sonar la marcha ‘Amarguras’ de Manuel Font de Anta y Manuel Font Fernández de la Herranz en homenaje a Julio Luque Virués fallecido en la tarde del pasado viernes.

Al paso del cortejo por la calle Beato Marcelo Spinola se realizaba otro emotivo homenaje, en esta ocasión, al cofrade recientemente fallecido Javier Nieto Tocino. En este momento, la hermandad del Huerto realizó una ofrenda de un ramo de flores a la Virgen de la Soledad y sonó la marcha ‘La Oración en el Huerto’.

Ya en su barrio se realizó una petalada al paso de la Virgen y Samuel Sánchez dedicaba unos versos a la Santísima Virgen.

En torno a la hora prevista, se aproximaba el cortejo a la recogida. A los sones de ‘Mater Mea’ de Ricardo Dorado se ponía fin a una jornada llena de momentos que serán inolvidables para todos los hermanos de la corporación del viernes santo y de todos cuantos presenciaron el procesionar de la hermandad por las calles de San Fernando.